La caricia del gato negro: Año Dos

Gato negroHoy La caricia del gato negro cumple su segundo año. Dos órbitas completas alrededor del sol. Y sin llegar a quemarnos (del todo). Un trayecto y un tiempo a lo largo del cual muchas cosas ocurren y otras, aparentemente no, pero se piensan, o se sienten, o se sugieren. O se escriben. Y a caballo entre esos tipos de acontecimientos me he movido otro año más. En este blog he compartido tanto algunas que ocurren en carne y polvo como otras (la mayor parte) que suceden sólo en mi imaginación y que, con un poco de suerte, quizás también sucedan en la vuestra: la de aquellas personas y entes que me leéis desde que publicará, hace dos años, el primer relato. Aquel que diera nombre a todo esto y que podéis leer en este enlace. Y no creáis, los que no me leéis, que estáis exentos. Conocedores de la existencia de estos relatos, fantaseáis: “¿qué estará escribiendo el mamarracho este?”, e imagináis, —oh sí, lo sé muy bien—, lo mal o bien que escribo y el tipo de historias que pueblan esta bitácora. Leed malditos, leed. Y compartid.

Ha llegado el momento: toca hacer una valoración del éxito y del estado de la misión de la conquista del mundo (literario y terráqueo) que me auto impuse al crear La caricia del gato negro. Compartiré los avances de la campaña de este “Año Dos” teniendo en cuenta el anterior hito y los objetivos que establecí entonces (pinchando aquí podéis ver la evaluación completa del Año Uno).

Pues bien, en este período el blog ha pasado de aquellos 500 seguidores a los actuales 1.100 fieles. El número de visitas asciende a 20.800 y han sido perpetradas por 9500 visitantes de 83 países. Buenos números aunque no siempre fiables, habida cuenta de que al blog llegan lectores —guiados por distintas parafilias— tras realizar búsquedas tales como “Relatos eróticos de mujeres con gatos”. Doy fe.

Sean cuales sean las motivaciones, estas han sido las entradas más visitadas:

Datos 4

En resumen, aunque la progresión se mantiene, y los números doblan a los del curso anterior mostrando una clara tendencia hacia la gloria y el éxito de ventas (que se consumarían, a este ritmo, dentro de aproximadamente uno o dos milenios), los tempos siguen sin ser tan rápidos como mi voracidad y necesidad de atención exigen. Tampoco parece probable acercarme a corto plazo a, y cito textualmente de la entrada de hace un año: “las presentaciones, charlas, galas, premios, poliamor, hedonismo, algún problema con la justicia por esconder fortunas en paraísos fiscales, conocer a mis ídolos (de los cuales en adelante yo seré ídolo),…”

Si esto fuera poco, he de reconocer que la novela en construcción sigue a fuego lento…

Por ello, tendré que cumplir con alguna de las otras promesas que os hice en 2016 para que me tachéis de inconsistente, pero no de mentiroso. Son estas: sorpresas, sorteos y foto sexy del autor.

Pero dejemos esto para el final y centrémonos ahora en la conquista del mundo.

Como pocos de vosotros recordaréis, tal vez los más fieles (esos que viajan por el mundo y visitan este blog porque creen en mi gloriosa misión), en la entrada análoga del año pasado había varios puntos de la geografía planetaria que se mantenían fuera de mi alcance, pequeñas e irreductibles aldeas como La Madre Rusia plantaban cara a mi expansión. Me enorgullece decir que este año sus vastas fronteras no han resistido mis acometidas. Intuyo que el relato Sergei, mon amour, me ha abierto las puertas.

La presencia en África era anecdótica en aquel lejano 2016. Este año sin embargo la conquista ha avanzado con pulso firme por aquellas tierras. Descubrí hace un tiempo, entre las búsquedas en Google a través de las cuales llegan lectores a este blog, una que puede esclarecer este avance territorial de algún modo: ¿Cómo saber si un negro es buena persona? Gran búsqueda, gloriosa pregunta al oráculo que, además de ser un microrrelato en sí misma —uno que aúna todo lo mejor de la humanidad en ocho palabras delicadamente escogidas—, me hizo pensar que, tal vez, el turismo sexual y lo impredecible de los resultados en las búsquedas podían ser los factores causantes del éxito en la expansión a través del continente de los Ñus. Prefiero pensar que no es así.

De Groenlandia mejor no hablemos. Esa enorme mancha en mi currículo amenaza con hacerse crónica. No veo la luz y ya ni los cubatas los pido con hielo. Consultaremos con el equipo de I+D+i para ver que se les ocurre al respecto.

Todavía no he tenido ni una visita del país más poblado del mundo. Mucho se dice del control sobre el tráfico de internet que existe en el gigante asiático, pero poco se habla de la leyenda de Lin Hi Tan, Emperador chino cuya hija perdió su gato negro. Decretó que todo ciudadano que viera un gato de esas características y no lo atrapara sería ejecutado. Los felinos no son fáciles de coger, ni siquiera los domésticos, así que imaginad las ganas que tenían aquellos vasallos de cruzarse con un gato negro. De ahí (y de otras historias) surgió la superstición y la mala reputación de tan adorables criaturas. Cuentos chinos. Temo que si quiero avanzar en la expansión de este imperio literario tendré que cambiar las connotaciones felinas del nombre del blog —o ayudarme de informáticos capaces de derribar el bloqueo de seguridad—. Queda pendiente para este tercer año que comienza.

Entre tantas ausencias internacionales y como contrapunto positivo, he añadido a mi colección de conquistas estas dos joyas: Curazao y San Cristóbal y Nieves. También recuerdo con cariño mi llegada triunfal a Kazajistán, Tanzania, Georgia, Pakistán, Hong Kong, Kuwait, Moldavia, Jordania, Bangladés, Laos, Vietnam,…

Estados Unidos se ha convertido en la segunda de mis potencias por número de visitas tomando la delantera a Argentina y México. Es de suponer que la mayor parte de estas visitas provengan de la Casa Blanca y se deban a la gran relación que me une con Donald. Sí, Trump —ni con tan poderoso apoyo consigo mi objetivo—. También es verdad que ante un enorme mapamundi ambos compartimos buenos ratos, pero en la cosa cultural tenemos distintas visiones.

Así queda el mundo (en naranja, lo conquistado):

Mapa de la conquista 2

Antes de llegar al final deseado quería aprovechar para agradecer una vez más a los incautos que leéis mis relatos y las entradas de La caricia del gato negro, el valioso tiempo y cariño que le dedicáis a hacerlo. Sé que ahora necesitáis más de esta droga buena y sana, y yo seguiré siendo vuestro amable camello, ese que al principio os la da gratis y luego os cobrará 19,90 € por ejemplar. Gracias y nos seguimos leyendo aquí y allá.

Y no voy a alargar más el suspense. De sobra conozco los únicos intereses que os han empujado a leer hasta aquí: regalos y carne.

Anuncio próximo sorteo para celebrar que hemos superado los 1.000 seguidores y las 20.000 visitas. Los ganadores se llevarán un ejemplar de Perdedores y otros héroes: un libro que recopila mis relatos publicados en este blog y alguno inédito de regalo, y además un ejemplar de la antología Relatos ALEABILBAO 2016-2017 que incluye mi nuevo trabajo El último relato. Estad atentos a las próximas entradas en las que explicaré la forma de participar.

Ahora sí, llega la difícil hora de cumplir con lo prometido. El premio, o el castigo. Tenía mis dudas, pero tras la insistencia de miles de seguidores de todo el mundo y a la vista de que las parafilias atraen nuevos lectores a mi blog, he decidido satisfaceros y hacer un sentido homenaje a todos esos instagramers exhibicionistas que, con la excusa de lo literario, llenan las redes de músculo, carne y glándulas. Ahora soy uno de ellos. No volverá a pasar. Pinchad aquí para deleitaros con la foto sexy del autor.

Disfrutadla (o perdonadme) no os toquéis mucho y apoyad con fuerzas renovadas mi objetivo, nuestro objetivo, ya sabéis, las presentaciones, charlas, galas, premios, poliamor, hedonismo, algún problema con la justicia por esconder fortunas en paraísos fiscales, conocer a mis ídolos (de los cuales en adelante yo seré ídolo),…

Eskerrik asko.

Gracias.

Danke.

Gràcies.

Thanks.

Spasibo.

 

Andoni Abenójar

58 comentarios

  1. Jajaja… No puedo creer que la gente haga ese tipo de preguntas a Google (lo digo por lo de los negros) y que encima Google les lleve a tu blog para esclarecer sus dudas. Enhorabuena por los nuevos territorios conquistados. Lamento que el poliamor y las groupies persiguiéndote por la calle no hayan llegado aún, pero dale tiempo. Gracias a tu foto sexy seguro que avanzas en tu objetivo.

    ¡Saludos y enhorabuena!

    Le gusta a 1 persona

    1. Hola Mayte! Acabo de darme cuenta de que no te había contestado.
      Sí, es bastante alucinante que la gente haga ese tipo de preguntas que denotan tanta incultura y sensibilidad.
      Muchas gracias por tus palabras. Y, aunque dudo que esa foto «sexy» atraiga a más gente que la que ahuyente, por lo menos los que nos quedemos seremos los que sabemos reírnos de nosotros mismos 😉
      ¡Un abrazo y nos seguimos leyendo!

      Le gusta a 1 persona

  2. ¡Ja,ja,ja! Me ha divertido tu exposición, pero también me ha apabullado tal cantidad de datos, de entradas más visitadas… ¡Madre mía!
    ¡Enhorabuena, Andoni! ¡Bravo, bravísimo! ¡Comparto tu alegría! Y tu foto sexy de regalo,¡genial! Mañana se habrá disparado la cantidad de seguidores…
    ¡Abrazos!

    Le gusta a 1 persona

    1. Me encanta saber que te ha divertido el tono de mi exposición.
      Muchas gracias por la visita y por tus amables palabras.
      Lo de la foto… Espero que se quede en una absurda promesa cumplida. Porque como se empiecen a multiplicar los seguidores a raíz de esto puede que pierda el norte y en busca de más y más seguidores cambie la naturaleza literaria del blog para dedicarlo a otros ámbitos tristemente más populares… Jejejejej
      Un abrazo grande Sari!

      Le gusta a 1 persona

  3. Enhorabuena por esas cifras que, estoy segura, se triplicarán el año que viene. China no podrá seguir resistiéndose mucho más, los gatetes negros son los más bonitos de todos. Yo seguiré leyéndote, aunque me cueste 19,90€. Sarna con gusto no pica, dicen.

    ¡Un saludo!

    Le gusta a 1 persona

  4. Ich freue mich sehr auf deinen Erfolg!!!
    (Así le da más caché a la fe de lectores internacionales. Prometo que la traducción no tiene sentido obsceno ni significa «comería gustosamente un Schnitzel con vinagreta de patatas»)
    Un abrazo!

    Le gusta a 1 persona

  5. Qué máquina eres Andoni, una cosa: ese libro lo compro yo, ya me dices por privado donde puedo adquirirlo. Por lo que a tus pretensiones se refiere, creo que vas bien, no hace falta que conquistes china, pues más de la mitad ya pululan por aquí.

    Besarkada haundi bat Andoni. Badakit gutxi pasatzen naizela hemendikan ea aurten geio pasatzen naizen. Hori izango da nere propozamena.

    Aio malaio

    Le gusta a 1 persona

    1. Milesker Fabian!
      De momento haré una edición súper limitada para el sorteo, pero a no mucho tardar tengo idea de hacer una autopublicación. En cuanto esté en marcha te tendré al tanto 😉
      Ta lasai egon, hainbat gauza irakurtzeko dago zibermundu honetan, ezin dugu gure lagun guztien lan guztiak irakurri. Baina badakit hor zaudela eta ahal duzun guztietan irakurtzen dituzula nire ipuinak, nik bezela zure olerkiak ahal dudan guztietan irakurtzen ditudan bezala.
      Besarkada haundi bat ta aio pelaio!!

      Me gusta

  6. Felicitaciones por tus dos años en la blogosfera 🙂 y no te preocupes que ya conquistarás el mundo cuando menos te lo esperes…supongo que debes agradecer a los fetiches de la gente que han hecho así que conozcan tu blog. Yo creo que mientras se queden leyendo tus relatos no hay problema de como es que vinieron a parar a tu hogar virtual, en fin bonitas anécdotas para contar junto al fuego en el futuro jaja. Besos y que sigas muy bien.

    Le gusta a 1 persona

  7. Ya entiendo ese grano en el culo que tanto te molesta… es porque Groenlandia no te sigue, ya, se resiste a tus encantos, eso es porque todavía no han visto tu foto sexy, mira a ver si te ponen de portada en Playboy, entonces te lloverán los seguidores.
    Un abrazo.

    Le gusta a 1 persona

  8. Ay, Estrella… Como decía en un comentario anterior, la foto fue una promesa cumplida. Y «prometo no volver a prometer tal cosa» xD
    Y no, no conseguí derretir Groenlandia con este cuerpo que la providencia me ha dado…
    A partir de ahora sustituiré la infructuosa exposición de mis vergüenzas por otras estrategias más efectivas: el soborno y el chantaje. Jajajaj
    Abrazo.

    Me gusta

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.